Lo que partió como un simple rumor en redes sociales poco a poco se transformó en una verdadera bola de nieve que está afectando duramente a la cereza chilena. Fue el pasado 21 de enero cuando se viralizó la información de una presunta detección de Covid-19 en una caja del fruto, proveniente de Chile, en la ciudad china de Wuxi.
Ronald Bown, Presidente de la Asociación de Exportadores de Frutas, Asoex, en conversación con Emol Tv, calificó lo sucedido como una de las situaciones más complejas vividas en los últimos 30 años en el rubro agrícola, haciendo alusión al famoso caso de la uva contaminada.
“Lamentablemente en esa provincia se crea una situación publicitaria que empieza a engendrar otros problemas, se empieza esto a visualizar en redes sociales de forma explosiva, por lo tanto se crea un problema bastante serio desde el punto de vista del mercado, se deja de consumir, no tenemos la posibilidad de reaccionar en forma rápida y por lo tanto, tenemos todos los efectos que estamos viviendo hoy, en que los mercados están prácticamente cerrados”, detalló el Presidente de la Asoex en entrevista con Emol Tv.
El impacto económico en las exportaciones de cerezas superaría con creces a lo ocurrido con el caso de la uva de mesa, donde hubo pérdidas por más de 300 millones de dólares; hoy se habla de más de mil millones de la moneda estadounidense y los precios del fruto están entre un 15 y un 20 por ciento más bajos que lo habitual en China, principal importador de cerezas chilenas.
El Ingeniero Agrónomo y especialista en producción de cerezas, Carlos Tapia, también se refirió al impacto en el mercado y la preocupación que ha generado esta situación en los exportadores y productores de cerezas en nuestro país.
“Si bien el mercado nos ha dado un duro golpe, era el riesgo en el que siempre estuvimos inmersos, con un gran consumidor como es China pero con el temor de lo que significa trabajar con un monomercado en todo índole de detalles. Sin embargo, la insistencia permanente de poder lograr y alcanzar el potencial productivo de los huertos (cantidad+calidad+condición) ha dado la razón de que este negocio puede ser “normal” ya que hoy con este problema instalado en el Mercado Chino, la fruta de mejor calidad y condición es la que hoy se obtendrán resultados positivos, si bien no espectaculares de lo que estábamos acostumbrados, pero simplemente positivos en cuanto a retornos”, manifestó Tapia.
A juicio de Bown, Presidente de la Asoex, es urgente que las autoridades chinas “tengan una actitud coherente con la situación, eso significa que digan: señores, consumir cerezas no tienen riesgo alguno y si se refieren a la cereza chilena mejor”; esto considerando que las exportaciones de cerezas nacionales son fiscalizadas por las autoridades centrales chinas, tanto en Chile, como también al arribo al país de oriente, protocolo que asegura que la fruta salga cumpliendo todos los protocolos exigidos desde los puertos hacia otros mercados, por lo que la presunta contaminación podría haberse dado en ese trayecto y no en nuestro país.
Afortunadamente, en las últimas jornadas ha habido indicios de recuperación del mercado de la cereza en el país oriental, lo que estaría relacionado con la pronta celebración del año nuevo chino, el 12 de febrero, en donde el fruto rojo tiene un rol protagónico.
