Por: Santiago Cabezas -Product Manager Nutra•Especialidades Agrospec.
La última temporada de exportación de cerezas a China y otros mercados de destino, representó un importante desafío para la industria frutícola nacional. Calidad y condición fueron sometidas a importantes retos, como por ej. soportar más de 60 días de transporte y almacenaje, previo a su comercialización.
Lo anterior, sin duda, puso a prueba los programas nutricionales aplicados en cada predio. No obstante, la buena noticia es que el manejo nutricional a nivel de huerto es un aspecto abordable para los productores de cerezas, especialmente en lo que se refiere a aumentar la firmeza de la fruta y prolongar su vida postcosecha.
Calcio, su aporte es fundamental
El rol del calcio en las plantas está ampliamente estudiado y podemos comentar que:
-Participa en la formación de la membrana plasmática, pared celular y, con ello, la estructura de la planta y de la fruta.
-Disminuye la producción de etileno durante la cuaja, hormona de la senescencia que va en contra de una buena postcosecha.
Una adecuada y oportuna nutrición cálcica permite:
-Minimizar desórdenes fisiológicos de la fruta como el pardeamiento interno.
-Mejorar firmeza y condición postcosecha de los frutos.
Fuentes de calcio
Los llamados óxidos de calcio, que en realidad corresponden a hidróxidos de calcio, son una fuente de alta concentración de este nutriente y tienen la ventaja de no aportar otros iones que pueden afectar nuestros objetivos productivos. A diferencia de los carbonatos de calcio, no aumentan la alcalinidad ni afectan la fijación de macro y microelementos.
Además, los óxidos de calcio tampoco incrementan significativamente la conductividad eléctrica o salinidad, como sí ocurre con los sulfatos, sobre todo en situaciones de escasez hídrica. Por esto, los óxidos de calcio son una excelente alternativa para fertilizar vía fertirriego.
Calcio al suelo
A continuación, presentamos los resultados del estudio Evaluación de calcios en cerezos. Dr. José Ignacio Covarrubias, U. de Chile.
-Fuentes de calcio: óxidos de calcio.
-Dosis: 2,1; 17,5 y 35 (CaO L/ha).
-Época de aplicación: en 100% de flor y postcuaja (fruto tamaño arveja, 10 mm).
-Evaluación:
-Después de 35 días de almacenaje a 0°C.
-Después de 35 días de almacenaje a 0°C + 3 días a 22°C.
Se observaron efectos en:
-Concentración de calcio ligado.
-Firmeza de los frutos.
-Pardeamiento del pedicelo.
Según los datos obtenidos se concluye que, el calcio aplicado al suelo en los momentos indicados se traduce en mayores contenidos de calcio ligado en fruta a cosecha. También es posible observar mejoras en parámetros de firmeza (en este caso, medido mediante un equipo de Texture analyzer) e incluso, menores valores asociados al pardeamiento de pedicelo a salidas de frío.
Por otro lado, es valioso destacar que las aplicaciones de calcio al suelo favorecen el crecimiento radicular, ya que:
-Contribuyen a la floculación de arcillas.
-Aumentan la porosidad del suelo.
-Incrementan la oxigenación del suelo.
Lo anterior resulta en una mejora en la capacidad exploratoria y de absorción de las raíces, lo cual es crítico para el aprovechamiento de los nutrientes presentes en el suelo, especialmente, si se toma en consideración el alza y la escasez de fertilizantes actuales.
Agradecimientos
José Ignacio Covarrubias. Doctor en Nutrición Vegetal, Profesor Universidad de Chile.