El calcio está en el suelo. Habiendo agua, lo absorben las raíces, sube por el xilema y llega al fruto.
Parece simple, pero hay mucho más detrás.
Debemos recordar primero porque nos importa tanto este elemento en la producción agrícola:
- El calcio tiene un rol relevante en fisiología de pre y postcosecha de la mayoría de las frutas. Sus principales funciones incluyen:
- Mensajero secundario en señales de transducción (como por ejemplo en el cierre o apertura estomática).
- Mantención y regulación de la permeabilidad de la membrana celular (importante por ejemplo en las células de la raíz sobre su capacidad para absorber y retener nutrientes).
- Cementante y refuerzo estructural de los constituyentes de la pared celular (relevante por ejemplo cuando hablamos de firmeza en frutos).
Ahora, debemos entender como el calcio llega al suelo y cuando está disponible:
- Los factores para que el calcio este presente y disponible en el suelo son:
- Aporte desde los minerales del suelo (carbonatos cálcicos, fosfatos cálcicos, sulfatos cálcicos y silicatos aluminio-cálcicos).
- pH del suelo (competencia con H+ en condiciones acidas, precipitación con carbonatos en condiciones alcalinas).
- CIC del suelo y porcentaje de saturación del calcio en la misma (capacidad de retener calcio y de intercambiarlo con la solución).
- Tipo de arcilla dominante en el suelo (diferentes arcillas tienen diferentes CIC, además de poder “secuestrar” el calcio en el caso de las arcillas expansivas).
Y, una vez que está disponible, debemos conocer las condiciones para que ingrese en la planta:
- Los factores que más influencian el ingreso y distribución del calcio hacia la fruta son:
- Transpiración de la planta o tasa de flujo de masas a través del xilema (mayor transpiración, es mayor absorción de calcio).
- Transpiración del fruto (la cual es mayor cuando el fruto se encuentra recién cuajado y va disminuyendo mientras avanza el desarrollo del fruto)
- Competencia entre sitios de intercambio de iones al interior del xilema (que no es lo mismo que los sitios de intercambio del suelo (CIC), quedando fijada una fracción del calcio en el camino).
- Formación de complejos poco solubles o insolubles dentro de la planta (como los oxalatos de calcio dentro de la vacuola).
Entonces, para que el calcio llegue al fruto y aporte a la calidad de este, existen muchas pasos, procesos y condiciones.
Desde Gowan, entendemos que no es posible modificar todo (como la transpiración de los frutos), pero si podemos a través de nuestras herramientas mejorar los factores determinantes para que el calcio este presente y disponible para las plantas.
Nuestra visión es que existe “un calcio para cada situación”. Si la oferta de calcio en suelo es alta pero poco disponible, Calcicrop (calcio complejado con lignosulfonato) es capaz de aportar y movilizar calcio, facilitando la absorción a través de las raíces. Si la oferta de calcio es pobre o insuficiente (por pH o tipo de suelo), y necesito aumentar la cantidad del elemento, Cal Flow (oxido de calcio con 58,8 % p/v) es la herramienta adecuada.
Referencias:
- Hocking B, Tyerman SD, Burton RA, Gilliham M. Fruit Calcium: Transport and Physiology. Front Plant Sci. 2016 Apr 29;7:569. doi: 10.3389/fpls.2016.00569. PMID: 27200042; PMCID: PMC4850500.
- Steinhorst L, Kudla J. Signaling in cells and organisms – calcium holds the line. Curr Opin Plant Biol. 2014 Dec;22:14-21. doi: 10.1016/j.pbi.2014.08.003. Epub 2014 Sep 16. PMID: 25195171.
- White PJ, Broadley MR. Calcium in plants. Ann Bot. 2003 Oct;92(4):487-511. doi: 10.1093/aob/mcg164. Epub 2003 Aug 21. PMID: 12933363; PMCID: PMC4243668.
- Winkler A and Knoche M. Calcium and the physiology of sweet cherries: A review. Scientia Horticulturae. 2019. Volume 245, Pages 107-115, ISSN 0304-4238. https://doi.org/10.1016/j.scienta.2018.10.012.