Este avance es parte de un ensayo que Güizzo Frutas Frescas S.A., de Mendoza, está realizando en el norte del país, específicamente en la provincia de Jujuy, en colaboración con el productor de frutas de carozo más temprano de la región.
“El estudio se centra en un bloque experimental joven de más de 2000 plantas de cerezos de distintas variedades de producción temprana. La fenología observada en los últimos 24 meses de estudio sugiere que, con ciertas variedades de bajo requerimiento de frío invernal, es posible adelantar la cosecha a la última semana de septiembre o la primera de octubre, tal como estamos viendo ahora”, explica Nicolás Güizzo, Gerente Técnico de Güizzo Frutas Frescas S.A.
“Los desafíos a futuro se enfocan en mejorar las estrategias de inducción a la dormancia, ajustar el momento de la ruptura de la misma, y optimizar la sincronización de las variedades, entre otros aspectos. Todo esto con el fin de determinar los manejos agronómicos adecuados y cuáles variedades se adaptan mejor a las condiciones agroclimáticas de la zona”, agrega.
“Creemos que algunas de las nuevas variedades de cerezas de bajo requerimiento de frío desarrolladas por aquellos programas genéticos como los de Bloomfresh, SMS y Zaiger, que actualmente se prueban en zonas tempranas de Chile y Sudáfrica, podrían tener un gran potencial de adaptación en esta región”, señala.
“Como empresa innovadora en la producción de cerezas tempranas en Argentina, uno de nuestros principales objetivos es adelantar la ventana actual de cosecha en el norte de Mendoza, que se ubica en las semanas 42/43, para llevarla a las semanas 39/40 en el norte del país”, concluye Nicolás Güizzo.