Por: Raúl Osorio, Director Peulla Asesorías y Servicios.
«Esta temporada habrá más fruta, menos manos de obra, más control fitosanitario, un panorama de transporte marítimo algo incierto, pero que no debería impacientarnos si tenemos la tranquilidad de haber cumplido en el campo«. (Fuente: Reporte Fonológico Avium, Temporada 2021-22, 5 de noviembre 2021)
En la etapa de Pre-Cosecha se desarrollan una seria de aplicaciones orientadas a control de plagas y enfermedades claves en cerezos, por ejemplo, control de Drosophila suzukii, Botritis cinérea. También se desarrollan aplicaciones exógenas de ácido giberélico del tipo AG3, posterior a la etapa de color amarillo pajizo (etapa III/inicio de pinta), que aumentan el tamaño y la dureza del fruto. (Fuente: Smartcherry “Ácido Giberélico en la producción de cerezas: bases teóricas y experiencias en Chile”).
Otras aplicaciones están orientadas a mejorar la condición y calidad de la fruta y órganos, como la vida útil de los pedicelos, entre otros factores de calidad.
También esta el uso de diferentes soluciones para evitar partiduras de fruto que se producen por eventos de precipitaciones previo a la cosecha.
Todos ellos aplicados en mezcla o solos dependiendo de las formulaciones disponibles y compatibilidades de mezcla de ellos.
Una vez más y al igual que en los artículos precedentes, para los asesores, investigadores y productores es muy importante:
- Considerar una correcta aplicación de los productos, como también la calibración de las maquinarias con las que se realizan dichas aplicaciones.
- Una máquina calibrada, con presión y marcha adecuada, boquillas en buen estado, etc. permite que la aplicación de cualquier producto sea efectiva (Carlos Tapia).
Ya hemos revisado en la publicación anterior, que es vital que:
- Se realice la mantención preventiva de cada uno de los equipos disponibles (atomizadores y tractores).
- Contar con las pautas de calibración precisas y adecuadas a cada situación de huertos según topografía, edad de huerto y sistema de conducción.
Para desarrollar una calibración adecuada para ejecutar estas aplicaciones debemos considerar:
a)Volumen de agua a utilizar
b)Volumen de canopia a tratar (frutos, tejido foliar y madera)
c)Volumen de aire necesario para desplazar las aplicaciones
d)Velocidad de avance de las aplicaciones en terreno para lograr un buen cubrimiento o cantidad de depósito en el objetivo (frutos, tejido foliar y madera).
Usaremos la misma metodología descrita en los artículos precedentes para determinar los requerimientos de aplicaciones en la etapa de precosecha de cerezos.
Volumen de agua: Siempre debemos considerar que nuestro objetivo es lograr una buena “cobertura de gotas” en los órganos de nuestro cultivo, que a su vez dependerá de: “la estatura, tamaño o volumen de canopia”.
Una forma de calcular el volumen de agua a utilizar es determinando el volumen del cultivo a través de TRV (Tree Row Volumen) o Volumen de árbol. TRV (m3 de árbol/ha) = [altura del árbol desde las primeras ramas (m) x ancho promedio del árbol (m) x 10.000 (m2/ha)] / Distancia entre hileras (m).
La dimensión de los árboles en esta etapa del cultivo (precosecha) es muy similar en la mayoría de los huertos de cerezos y tendrá variaciones dependiendo de los sistemas de conducción.
A modo de ejemplo consideraremos un huerto con las siguientes medidas:
Altura promedio de árbol desde la primera rama: 2,7 metros (3,2 metros total)
Ancho promedio de árbol: 2,5 metros
Distancia de plantación: 4,0 metros
El TRV = (2,7 x 2,5 x 10.000) / 4,0
El resultado será TRV = 16.875 m3 de objetivo.
Para obtener el volumen de agua a utilizar Byers et.al suponen un volumen de 0,0936 L / m3 de canopia con follaje.
Para nuestro ejemplo, por lo tanto, necesitaríamos 16.875 x 0,0936= 1579,5 L de agua / ha.
Sin embargo, tan solo necesitamos un 80 % de este volumen calculado para aplicaciones dirigidas a árboles bien podados, adecuada luz en el árbol, dardos vigorosos en ramas principales, muchos espacios en el follaje que permite el paso de luz. Este cálculo es citado por el Ing. Agr. Guillermo Lorca Beltrán Profesor Mecanización Agrícola de la Facultad de Agronomía e Ing. Forestal, PUC de Chile glorcabeltran@hotmail.com, en su artículo EXACTITUD SIN APURO de la revista Mundo Agro, se debe aplicar un índice de ajuste de densidad foliar.
Si aplicamos el factor 0,8 (Bien podado), arroja un volumen de agua a aplicar de 1260 L de agua / ha.
Volumen de aire a desplazar en aplicaciones de precosecha:
Una forma de calcular el volumen de aire necesario también es determinando el volumen del cultivo a través de TRV (Tree Row Volumen) o Volumen de canopia de árbol. TRV (m3 de follaje/ha) = [altura del árbol (m) x ancho del árbol (m) x 10.000 (m2/ha)] / Distancia entre hileras (m).
Para el mismo ejemplo anterior, un huerto de 2,7 metros de altura promedio, con un ancho de “ramas” de 2,5 metros y una distancia de plantación de 4,0 metros.
El TRV = (2,7 x 2,5 x 10.000) / 4,0.
El resultado será TRV = 16,875 m3 x 0.8 = 13.500 de objetivo (frutos y tejido vegetal en precosecha).
Este volumen calculado es el que debemos desplazar para llegar a nuestros objetivos.
Los equipos hidroneumáticos con asistencia de aire que son los más utilizados en nuestra fruticultura tiene distintas capacidades de desplazamiento de aire según su modelo y su tipo de grupo de aire.
Los distintos modelos existentes en el país generan cantidades que van desde los 25.000 a 90.000 m3 de aire / hora. Para ajustar la cantidad de aire / ha (13.500 m3 en el ejemplo) debemos considerar:
- La velocidad de avance de la aplicación
- Ajuste de la caja multiplicadora de los grupos de aire
- Ajuste de las aspas en posición o inclinación necesaria.
- Ajuste de las RPM de trabajo.
Para nuestro ejemplo consideraremos una velocidad de avance de 6,5 km/hora en un huerto de 4,0 metros de distancia entre hilera y una velocidad de salida de aire desde el grupo de aire del equipo de 16 m/seg:
D. Plantación | km/hora | Tempo/há (min) | m3 de aire /há |
4 | 6,5 | 23,08 | 13646,8 |
Elección de Boquillas: Siempre se debe mantener la limpieza de estos componentes y chequear el caudal que entregan por minuto y comprobar que sea el indicado por el fabricante, no superando un 10 % de desgaste.
Elegiremos boquillas que desarrollen gotas de tamaño medio a pequeño para generar buen deposito en los objetivos (buena cantidad de gotas / cm2).

Para poder desarrollar los planes de manejo de aplicaciones eficaces y eficientes debemos tener equipos previamente diagnosticados en todos sus componentes, reparados y reemplazados sus elementos críticos, realizar mantención anual y periódica, limpieza permanente y tener personal altamente capacitado para desarrollar las aplicaciones que se traducirán en el éxito de nuestro cultivo a la cosecha con el menor impacto al ambiente y las personas.