Sin embargo, durante la presente temporada diversos aspectos de la importación, desaduanaje, distribución y venta de la cereza en el país asiático, volvieron prácticamente a la normalidad.
Esto, sin lugar a dudas, impactó positivamente en lo que ha sido la campaña de cerezas 2022-23, la que ha mostrado viajes expeditos, descarga y venta de buena fruta, incluso post Año Nuevo Chino. En este contexto, nuestros corresponsales en China conversaron con Benjamín King, CEO de la empresa Kinyu.
Kinyu es una compañía creada por empresarios expertos en China, que frecen una plataforma de soporte para empresas internacionales con cadenas de suministro en el país asiático. Es decir, poner a disposición un esquema de soft-landing para empresas, entre ellas del rubro cerecero, que no tienen presencia física en China, ahorrándoles tiempo y recursos, para que puedan concentrarse en operaciones posteriores.
Benjamín King comentó sobre los aspectos generales de cómo está la situación para hacer negocios en China luego de la apertura post COVID y como se proyecta el ambiente de negocios:«(El levantamiento de las medidas Covid) ha impulsado los niveles de confianza en el desarrollo empresarial y la planificación a largo plazo; durante las restricciones del Covid, la mayoría de las empresas retrasaron cualquier decisión importante con respecto a China. La gente ahora está planeando sus viajes de regreso y nos estamos preparando para conocer a más personas cara a cara«.
El levantamiento de las restricciones Covid en enero pasado, fecha que coincidió con una de las semanas de mayor arribo de cerezas a China, generó una ola de contagios que, en cierto momento, hizo temer a las exportadoras pudiera repetirse el escenario de los dos años anteriores; afortunadamente, no fue así.
«El aumento reciente tuvo un impacto en los plazos de entrega de la producción en China y se vio agravado por el Año Nuevo Chino. Lo mismo pasa con muchos procesos internos y tercerizados, todo sufrió retrasos simplemente porque la gente estaba enferma. Esto ha disminuido ahora, y parece que la mayoría de las personas se han infectado y todo está volviendo a la normalidad con bastante rapidez«, aseguró Benjamín King.
La apertura ha permitido que los negocios se lleven a cabo de manera normal, incluso, según el Ceo de Kinyu, que éstos hayan aumentado: «La apertura ha aumentado enormemente la actividad de viajes, en nuestros propios proyectos, tenemos a nuestros clientes viajando a China y los proveedores viajan al extranjero. Los viajes internacionales han regresado a toda velocidad y el precio de los vuelos, aunque sigue siendo elevado, no ha detenido a la gente. Además, también se están reabriendo más rutas de vuelo».
Sin duda, esta temporada de cerezas ha marcado la diferencia en cuanto a logística respecto de las dos anteriores; el transporte desde el exterior como interno se ha agilizado, lo que ha impactado positivamente.
«Dentro de China el transporte por carretera ha aumentado mucho a medida que se han liberado las restricciones internas. La logística en el extranjero y la exportación se han vuelto más rápidas«, indicó Benjamín King.
Finalmente, respecto de la situación económica de China, King concluyó: «Creo que el impulso por el proteccionismo se ha debilitado por el manejo de la situación del Covid. Espero ver un ligero debilitamiento de tales políticas; por ejemplo, el gobierno de China ha suavizado su postura sobre las empresas de tecnología, lo que se considera ampliamente como un movimiento para reactivar el desempeño económico. Lo mismo ocurre con la mejora de las relaciones comerciales con otros países a medida que aumenta el intercambio personal y la comunicación.»
