Revisa acá el completo boletín climático desarrollado para BASF, por Fernando Santibáñez Q Ing. Agron. Dr. en Bioclimatología.
Durante el mes de marzo continuará retirándose La Niña, lo que se traducirá en una normalización de la temperatura de las aguas superficiales. Ya puede apreciarse una importante acumulación de aguas ligeramente tibias en las costas de Ecuador y Perú, lo que no llega a conformar un cuadro de Niño costero como ha aparecido en algunas publicaciones, pero es una señal positiva de una tendencia a la normalización de la temperatura de las aguas. En el transcurso del otoño, esto se manifestaría en una activación de los frentes, los que podrían dejar de estar bloqueados por el anticiclón. Esta condición favorable se mantendría durante todo el invierno, para luego revertirse y volver a enfriarse hacia el próximo verano. Lo anterior conforma un cuadro relativamente benigno en materia de precipitaciones para el invierno, particularmente la caída nival, que podría situarse cercana a la normalidad en la cordillera central. No tendríamos un invierno francamente lluvioso, pero la probabilidad de que sea seca es baja, augurando una aceptable temporada de riego en 2025-2026.