Drosophila suzukii es una plaga silenciosa que daña la fruta desde el interior y cuyo impacto se evidencia en destino. Frente a este riesgo, Bayer destaca la importancia de una estrategia preventiva basada en BELT®️, producto con alta flexibilidad de uso, solo 3 días de carencia y sello Beesafe para la protección de polinizadores.
Drosophila suzukii continúa posicionándose como una de las plagas más desafiantes para la industria de la cereza. Su principal complejidad radica en que actúa de manera silenciosa: afecta la fruta desde adentro, y gran parte del daño solo se manifiesta al llegar a destino, generando pudrición, pérdida de firmeza y deterioro de la calidad, con impacto directo en la condición exportable.
Ante este escenario, la prevención temprana y estratégica es fundamental. Bayer enfatiza que una planificación adecuada puede marcar la diferencia entre una fruta que llega firme y sana, y una que pierde valor durante el viaje.
Para este propósito, la compañía recomienda el uso de BELT®️, un insecticida que destaca por su protección confiable, adaptabilidad y compatibilidad con programas productivos exigentes. Entre sus principales beneficios se encuentran:
Máxima flexibilidad de uso, ideal para distintos manejos y realidades productivas.
Solo 3 días de carencia, facilitando su integración en momentos clave previos a cosecha.
Sello Beesafe, que garantiza seguridad para abejas y otros aliados naturales esenciales para el equilibrio del ecosistema frutal.
La recomendación de Bayer es clara:
No esperes a ver el daño.
Anticiparse es la única manera de asegurar cerezas firmes, sanas y listas para llegar impecables a destino.




